Los beneficios del baile en nuestra salud

Seguramente has escuchado el dicho popular que dice que 'bailar es terapéutico', quizás tu misma has podido sentirte más feliz luego de dejarte llevar por el ritmo de una canción o has disfrutado del baile con los beneficios que trae para tu cuerpo... A todo esto ahora se le suman estudios que respaldan los beneficios de esta divertida práctica.

Bailar es una actividad que demanda un esfuerzo físico que nos sirve como ejercicio cardiovascular: mejora la flexibilidad, agilidad y coordinación de nuestro cuerpo, además de que nos ayuda a respirar mejorar al aumentar nuestra capacidad de recibir oxígeno y fortalecer los pulmones.

Salud mental al bailar

En cuanto a nuestra salud mental han sido muchos los investigadores que han mirado de cerca qué es lo que nos aporta el baile. Universidades como la de Columbia, Derby, Nueva York, Deakiny y Örebro, han iniciado indagaciones acerca de por qué el baile nos hace felices.

La salud mental, tan relevante como la física

La conclusión que se repite entre unos y otros es que el baile es muy beneficioso para nuestra estabilidad emocional. Si sufres de algunos trastornos psicológicos además de acudir a un experto también te sería útil bailar, pues las evidencian dicen que hacerlo nos ayuda a superar:

• Estrés
• Ansiedad
• Depresión

En dos de los casos, las universidades se centraron en pacientes con estos tres síntomas psicológicos y notaron que, al iniciar la práctica del baile como una parte de su rutina, los síntomas disminuían y además de que decían sentirse más felices. Algunos de los pacientes observados eran adolescentes con dolencias físicas también, como dolores de espalda y cuello, que mejoraron luego de 'convertirse en bailarines'.

Los investigadores de la Universidad de Nueva York pudieron concluir que, para los niños menores de 5 años, bailar era sinónimo de felicidad y alegría.

Otro estudio estadounidense se centró en los adultos mayores demostrando que cuando practican el baile, se sienten menos afectados por el desgaste y deterioro de algunas funciones mentales. Incluso comparativamente frente a otras actividades que también son saludables.

"Baila primero. Piensa después. Es el orden natural" -Samuel Beckett, dramaturgo, novelista, crítico y poeta irlandés.

¿Por qué pasa esto?

Físicamente algo sucede. Bailar nos hace liberar endorfinas, popularmente conocidas como 'hormonas de la felicidad'.

Estas amigas de la alegría que sentimos, en realidad son neuro-péptidos que mantienen a raya otras emociones o sensaciones como la tristeza y el dolor. Por eso cuando las reducen nos sentimos libres, risueños y alegres, tal como nos puede pasar al bailar.

Descubre tu nivel de felicidad

A la parte biológica hay que sumarle también el hecho de que en su esencia el baile es una actividad social que nos permite desinhibirnos, bromear, cantar, relacionarnos con otros y por su puesto movernos. Esta práctica de coordinación estimula nuestro cerebro y también nos permite sentirnos más abiertos socialmente.

"A nadie le importa si no puedes bailar bien. Levántate y baila. Los grandes bailadores son muy buenos por su pasión" - Martha Graham, bailarina y coreógrafa estadounidense.

Algunas personas se sienten más cómodas bailando que hablando con otros, pues es una manera mucho más sencilla de expresarnos y dejar escapar lo que llevamos dentro.

¿Hace cuánto no bailas?

Quizá esa enorme sensación de cansancio que llevas sobre los hombros podría aliviarse bastante tan solo con un par de canciones en la pista de baile o tal vez requieras acompañamiento terapéutico adicional al que puedes acceder a través de este listado de especialistas.

¿Por qué es importante tomarse un descanso del trabajo?

El hecho es que no necesitas bailar a diario para sentirte mejor, un estudio revelado por The Scholarly Publishing and Academic Resources Coalition concluyó que con una vez a la semana que tengamos la oportunidad de bailar nos basta para sentirnos con más energía.

Otro estudio (esta vez realizado por la escuela de medicina de Washington University) afirmó que el bailar tango argentino fue el mejor ejercicio para los pacientes de la enfermedad de Parkinson que ellos observaron, y que necesitaban mejorar su capacidad de movimiento.

"La verdadera expresión de un pueblo está en su danza y en su música. Los cuerpos nunca mienten" - Agnes de Mille, bailarina.

Es un hecho que, sin importar el ritmo que nos guste más, los latinos somos hábiles para llevar el ritmo y somo conocidos en términos generales como amantes del baile como un tipo de expresión cultural que nos identifica.

Si sientes mucha pena para salir a bailar, pero deseas hacerlo, apóyate en psicoterapia para vencer el temor y no te pierdas de los beneficios. Y si te sientes bien, bailar puede aumentar tu bienestar.

No hay que esperar a sentirnos fatales para buscar ese respiro e inyección de felicidad, ¿no te parece?

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