El Ghosting o cómo terminar una relación sin dar explicaciones

¿Cómo se debería terminar una relación de pareja? La respuesta más lógica sería "hablando" pero hoy en día, con el auge de las redes sociales, la respuesta puede ser "ignorando". Es tal el auge de la tendencia a dejar al otro sin dar explicaciones, que ya existe una definición en inglés: 'Ghosting'.

Es como la desaparición paulatina del otro, su transformación en fantasma (ghost, en inglés) porque no responde los mensajes de Whatsapp, no interactúa con su pareja en redes sociales o, simplemente, lo bloquea sin más explicaciones.

Esta crueldad encuentra su mayor aliado en las nuevas tecnologías porque la posibilidad de preguntar algo y no encontrar respuesta, sólo es posible con la complicidad de la mensajería instantánea. En persona, cara a cara, es imposible no encontrar respuesta. Aunque el otro no diga palabra, podemos interpretar sus gestos y su actitud. En cambio, en redes sociales y en Whtasapp hablamos a un vacío.

La socióloga Sherry Turkle, autora del libro Reclaiming Conversation, cree que la tendencia tendrá efectos psicológicos en los adolescentes. Así lo ha explicado en diversas entrevistas:

Si las nuevas generaciones se están acostumbrando a hablar y no obtener respuesta, esto aparte de acarrear serias consecuencias emocionales en el momento, predispone a la gente a acostumbrarse a la idea de que puede ser ignorada, y por tanto de que puede tratar así también a los demás. En suma, se naturaliza un estándar de comunicación y relacionamiento de gran pobreza expresiva que tiende a un descenso generalizado de la empatía.

En Colombia ya son frecuentes los términos "fantasmeo" o "houdinazo" (aludiendo al mago Houdini). "Me fantasmeó" o "me hizo un houdinazo" son expresiones utilizadas por los jóvenes para indicar que su supuesta pareja, la persona con la que estaba teniendo una relación sentimental, se desapareció de un momento a otro.

Las redes sociales pueden tomarse con tranquilidad o convertirse en una trampa peligrosa

El fenómeno no es aislado. Según una encuesta de la Revista Elle, el 26% de las mujeres y el 33% de los hombres han hecho o les han hecho ghosting. El dato cobra más importancia en el estudio realizado por la investigadora social, Julie Spira, quien afirma que el 80% de los jóvenes nacidos entre 1985 y 1995 han sido víctimas o han protagonizado un ghosting.

Para algunos psicólogos se trata de la reacción de alguien que quiere evadir los conflictos o que tiene bloqueos de comunicación que le impiden asumir su inconformismo con una situación y expresarlo abiertamente.

Consultado por el periódico El Colombiano, el coordinador clínico del Centro de Atención Psicológica de la Universidad Pontificia Bolivariana (Medellín), Jaime Giraldo, explicó que las relaciones que empiezan de manera virtual (e-mail, redes sociales, chats) son muy proclives a terminar rápidamente porque se basan en la "idealización" del otro y es probable que el corte "virtual" de la relación sea coherente.

Sin embargo, cuando hay contacto físico y periódico con la otra persona y de un momento a otro se le hace ghosting, la víctima se siente desconcertada y deprimida. Como no ha tenido la oportunidad de confrontar y encontrar respuestas, su "duelo" queda incompleto y sufre problemas emocionales asociados al vacío y la incertidumbre.

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