De lo que nadie habla (Abuso Sexual Infantil - ASI)

El Abuso Sexual Infantil (ASI), es una realidad que diariamente convive con nosotros. En nuestro país muchos niños y adolescentes sufren de este grave problema, sin ayuda profesional.

5 FEB 2018 · Lectura: min.
De lo que nadie habla (Abuso Sexual Infantil - ASI)

El Abuso Sexual Infantil (ASI), es una realidad que diariamente convive con nosotros. En nuestro país muchos niños y adolescentes sufren de este grave problema, el cual se presenta bien sea dentro del mismo hogar o fuera de él (colegio, universidad, casa de familiares o amigos, entre otros).

Como sociedad es importante que nos comprometamos a formarnos e informarnos acerca de este problema de alto impacto socialmente, pues es nuestro derecho salvaguardar la integridad tanto física, como emocional, social y espiritual de nuestros niños, adolescentes y mujeres.

El presente artículo tiene como finalidad dar a conocer algunos elementos importantes dentro de la temática del Abuso Sexual Infantil (ASI) en términos de prevención y detección frente a la sospecha de un posible ASI.

¿Qué es el Abuso Sexual Infantil (ASI)?

Encontrar una definición adecuada de abuso sexual es complejo, pues se puede ver influenciada por las diferentes corrientes éticas, sociológicas y religiosas, además de las creencias culturales y personales.

Sin embargo, se puede decir que el abuso sexual hacia menores ocurre cuando un adulto o cualquier persona ejercen un comportamiento o actitud sexual, sin el consentimiento o conocimiento para su propia satisfacción.

El abuso sexual puede ir desde la penetración vaginal o anal hasta tocamientos, masturbación, el exhibicionismo, expresiones verbales de contenido sexual, observaciones pornográficas, felación, cunilingüismo, penetración digital tanto vaginal como anal, caricias y besos inapropiados.

Es importante tener en cuenta elementos claves que caracterizan al abuso sexual a menores, como son:

  • El poder y dominio que ejerce el adulto sobre su víctima, con fines de gratificación sexual.
  • El uso de amenazas, engaños, coerción, soborno y fuerza física.
  • La vulnerabilidad y dependencia del niño/a.
  • La pérdida del respeto y la traición de la confianza.
  • El rompimiento de barreras emocionales y físicas.
  • El mantener el secreto y otras estrategias que atrapan a la víctima.
  • Inhabilidad del niño/a para comprender lo que está sucediendo (esto dependerá del grado de inmadurez emocional y el desarrollo cognitivo).
  • No hay opción, por parte del niño/a para detener o evitar el abuso.
  • Frecuentemente la incidencia del episodio de abuso progresa con el tiempo o en forma aislada y puntual.
  • Puede suceder en el seno de una familia, de una institución, o con un vecino-profesor-orientador-médico; en el lugar de trabajo… Es decir, no existe un ámbito específico.

El abuso sexual no discrimina religiones, clases sociales, etnias ni niveles educativos, es un fenómeno social universal.

Aunque recientemente se viene hablando de abuso sexual, también es importante decir que la violación coincide con varios de los términos que definen el abuso sexual. Por lo tanto, se puede definir la violación como un acto violento, premeditado e intencionado mediante el cual la víctima (niños, adolescentes o adultos) puede ser forzada al acto sexual en contra de su voluntad.

Según la legislación de cada país, la violación corresponde a un acto o intento de penetración vaginal, anal u oral.

¿Quiénes son las víctimas de abuso sexual?

Todo niño/a puede ser víctima de abuso sexual, no existe una característica específica, pueden ser de cualquier clase socio-económica, raza, credo o nivel de educación.

Existen algunos factores de riesgo que hace más vulnerables a algunos niños y pueda presentarse el abuso sexual:

  • Falta de educación sexual.
  • Baja autoestima.
  • Necesidad de afecto y/o atención.
  • Actitud pasiva.
  • Dificultades en desarrollo asertivo.
  • Tendencia a la sumisión.
  • Baja capacidad de toma de decisiones.
  • situación de aislamiento.
  • Timidez o retraimiento.

¿Qué Características puede llegar a presentar el agresor sexual?

Hacer un perfil del agresor sexual no es una tarea fácil, pues antiguamente se consideraba que eran personas con alguna enfermedad mental. El agresor puede llegar a ser una persona de apariencia normal, con un nivel educativo y socio-económico alto, un integrante de la sociedad "ejemplar", también puede ser el padre de familia, algún familiar cercano, un profesor, un vecino, etc., personas que tienen una relación cercana, razones por las cuales nadie sospecharía de ellos.

Se tiene la creencia que el abusador sexual fue víctima de abuso en su infancia, lo cual no es del todo cierto, pues muchos han sobrevivido a esto y en su mayoría son mujeres, las cuales no tienden a ser abusadoras (aunque no se puede descartar que por ser mujer no llegue a cometer algún acto de abuso sexual infantil).

Algunas de las características más comunes son las siguientes:

  • Los agresores pueden llegar a estar casados y habitualmente son familiares (padres, hermanos, tíos, primos, etc.), o allegados (profesores, vecinos, amigos de la familia, etc.) de la víctima, lo que les permite tener fácil acceso al niño/a, debido a la relación de confianza establecida. Sólo en un porcentaje muy bajo, el agresor llega a ser un desconocido.
  • Suelen ser personas solitarias que se les dificultad interactuar socialmente con personas de la misma edad y/o establecer vínculos de pareja.
  • Pueden ser personas dominantes, agresivas, controladores que abusan del poder y autoridad. Por otro lado, pueden ser inseguros, fracasados, depresivos, explotados y rechazados.
  • En la mayoría de los casos, son personas que han sido abusadas (física, psicológica, emocional y/o sexual) en su niñez, han experimentado violencia, rechazo, negligencia y/o abandonados.
  • Con frecuencia se muestran ante los demás (trabajo y círculo social) como personas dóciles, sumisas, calladas. Lo que los hacen ver como individuos respetables y con una buena educación.
  • Algunos tienen problemas de alcoholismo y drogas.
  • Tienen dificultad para manejar sus emociones.

Indicadores del Abuso Sexual

En el siguiente cuadro se exponen algunos indicadores que permiten identificar la sospecha o existencia de un posible abuso sexual.

CONSECUENCIAS

EMOCIONALES

CONSECUENCIAS

COGNITIVAS

CONSECUENCIAS

CONDUCTUALES

A Corto Plazo o en Período Inicial a la Agresión

Sentimientos de tristeza y desamparo.

Cambios bruscos de estado de ánimo.

Irritabilidad.

Rebeldía.

Temores diversos.

Vergüenza y culpa.

Ansiedad.

Baja en rendimiento escolar.

Dificultades de atención y concentración.

Desmotivación por tareas escolares.

Desmotivación general.

Conductas agresivas.

Rechazo a figuras adultas.

Marginación.

Hostilidad hacia el agresor.

Temor al agresor.

Embarazo precoz.

Enfermedades de Transmisión Sexual.

A Mediano Plazo

Depresión enmascarada o manifiesta.

Trastornos ansiosos.

Trastornos de sueño: terrores nocturnos, insomnio.

Trastornos alimenticios: anorexia, bulimia, obesidad.

Distorsión de desarrollo sexual.

Temor a expresión sexual.

Intentos de suicidio o ideas suicidas.

Pérdida y repetición de años escolares.

Trastornos del aprendizaje.

Fugas del Hogar.

Deserción escolar.

Ingestión de drogas y alcohol.

Inserción en actividades delictuales.

Interés excesivo por juegos sexuales.

Masturbación compulsiva.

Embarazo precoz.

Enfermedades de Transmisión Sexual.

A Largo Plazo

Disfunciones sexuales.

Baja autoestima y pobre autoconcepto.

Estigmatización: sentirse diferente a los demás.

Depresión.

Trastornos emocionales diversos.

Fracaso escolar.

Prostitución.

Promiscuidad sexual.

Alcoholismo.

Drogadicción.

Delincuencia.

Inadaptación social.

Relaciones familiares conflictivas.

Es importante aclarar que las conductas anteriores, no necesariamente corresponden a un posible abuso sexual, pueden ser producto de otra situación negativa por la cual esté pasando el niño, adolescente o mujer.

Por lo que se hace necesario que se consulte con un profesional para poder identificar o descartar un posible abuso sexual.

Consecuencias del Abuso Sexual

Las secuelas del abuso sexual varían de un caso a otro. Sin embargo, en la gran mayoría, genera un impacto grave en la salud mental y en la vida futura de la víctima.

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Las consecuencias se pueden dar dependiendo de lo siguiente:

  • El tipo de agresión, si este implica coito o intención de coito, sexo oral u otros comportamientos graves.
  • La edad tanto del agresor como de la víctima.
  • La relación existente entre la víctima y el abusador, si esta es cercana y protectora.
  • La duración y frecuencia de la agresión, si es puntual o se mantiene a lo largo del tiempo.
  • La personalidad del menor, si es capaz de buscar ayuda y/o usar estrategias de defensa.
  • La reacción inicial de las personas de su entorno.

Como señala Cuadros (2006) en su libro La Infancia Rota "el abuso sexual implica, necesariamente, la violación de la corporalidad física y psíquica, y, ante todo, en la mayoría de los casos (no en los de asalto sexual por personas desconocidas para el niño), la traición de la confianza, de la lealtad y la ruptura de la relación de protección que el adulto debe tener con su hijo, estudiante o familiar".

En la etapa adulta, la víctima de abuso sexual puede llegar a presentar, estados depresivos, dificultad para tener relaciones interpersonales sanas, complicaciones para alcanzar la intimidad con otra persona; problemas de disfunción sexual o por el contrario tener un comportamiento sexual promiscuo. Puede llegar a presentar inconvenientes en la formación de su identidad, personalidad múltiple, estados transitorios disociativos, incapacidad para sentir amor o placer.

En su gran mayoría, los niños presentan episodios de estrés postraumático, el cual rara vez es detectado, lo que lleva a la víctima a mantener un sufrimiento constante debido a que no se le protege de los estímulos, lo que hace que experimente constantemente y de manera vívida el abuso sufrido, cuando es expuesto a algún tipo de estímulo similar a los ocurridos durante el episodio de abuso, especialmente cuando es expuesto ante el abusador.

Muchas de las víctimas también presentan estados de hiperalerta, tristeza o depresión, incapacidad para concentrarse, pesadillas y todas las situaciones que puedan estar relacionadas con el evento del abuso.

Es importante tener en cuenta que:

  • El abuso sexual se puede presentar una sola vez, aunque por lo general son eventos repetidos y prevalecen a lo largo del tiempo. Además, pueden llegar a ser moderado, severo y/o progresivo.
  • Algunos episodios de abuso sexual pueden no ser violentos o generar daño físico, pero siempre habrá daño psíquico.
  • Todo abuso siempre generará un trauma. Así el niño/a no lo registre como dañino, aun cuando el abuso sexual, momentáneamente sea placentero o no tenga un significado importante, tendrá consecuencias graves para su desarrollo.
  • Atenta contra la integridad del niño/a, quien es tomado como un objeto y no como un sujeto con sus propios deseos.
  • Produce sentimientos de ansiedad, angustia o síntomas equivalentes y provoca sentimientos de vergüenza, culpa, miedo, ira, desvalorización, humillación, estigmatización.
  • Provoca sentimientos ambivalentes cuando el niño se siente traicionado por una figura relevante encargada de su cuidado y a quien le debe lealtad.
  • El 80% de los casos de abuso sexual es cometido por un conocido, la mayoría de casos por un familiar.

En caso de tener sospecha de un posible abuso sexual es importante que recurras a la ayuda profesional para brindar la atención necesaria tanto a la víctima como a sus familiares.

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Escrito por

Dra. Ángela María Sánchez R.

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