¿Qué son la orientación y el crecimiento personal?
Desde la antigüedad, los seres humanos hemos estado en la búsqueda de la realización personal, un estado en el nos sentimos satisfechos con todos los aspectos de nuestra vida, popularmente conocido como la felicidad. Sin embargo, llegar a él es un proceso de crecimiento y muchas veces necesita orientación.
A lo largo de los años, los estudiosos han concluido que la felicidad es un estado subjetivo, no hay una única definición sino que cada persona puede encontrarla cuando siente que todas sus necesidades están satisfechas. Sin embargo, descubrir cuáles son esas y qué debemos hacer para completarlas exige mucho trabajo, con frecuencia más interior que exterior. El equilibrio entre un entorno seguro y saludable, una buena vida social y el aprecio por nosotros mismos es lo que nos da plenitud. No es un estado permanente, aun así construir bases fuertes nos permite responder a los cambios del universo y volver a encontrar el equilibrio perdido, si se presentan situaciones adversas.
¿Cómo se relacionan orientación y crecimento personal con la psicología?
La psicología analiza, desde la ciencia y la filosofía, la mente y el comportamiento humano, además de su relación con el entorno. De allí se desprenden múltiples posibilidades de estudio, entre ellos el crecimiento personal.
Por años, los terapeutas se han ocupado de temas como la felicidad, la autoestima y la realización personal, para descubrir que no se trata de cuestiones aisladas y que tampoco significan lo mismo para todos los individuos. Un psicólogo puede acompañar el reto individual de sus pacientes y ayudarlos a descubrir los pasos a seguir para lograr su equilibrio. Aunque no hay una estandarización del camino, sí hay herramientas comunes que se pueden aplicar en la búsqueda de respuestas, las cuales puede compartir el terapeuta en un proceso de orientación.
¿Cuáles son los ejes de trabajo principales de la orientación y del crecimiento personal?
Según el psicólogo Abraham Maslow, los seres humanos tenemos una serie de necesidades que debemos satisfacer para llegar a la realización personal, con ellas hizo una pirámide que expresa el proceso de crecimiento y nos puede servir de guía.
Aquí una breve descripción de cada estrato, de abajo hacia arriba:
Básicas: son las necesidades fisiológicas que garantizan nuestra supervivencia. Asegurarlas requiere una inversión en autocuidado, tener la motivación y las condiciones ambientales propicias para que nuestro cuerpo funcione de manera adecuada y su deterioro no sea una carga.
Seguridad: esas condiciones ambientales que garantizan la satisfacción de nuestras necesidades básicas pueden verse amenazadas en cualquier momento, lo que puede causar una gran ansiedad. Tener la seguridad de que las tenemos protegidas nos da la tranquilidad para ascender en la pirámide.
Sociales: como animal social, el hombre debe relacionarse con los demás para sentir que hace parte de un grupo. No tiene que ser una persona popular, sino encontrar en otros comprensión y afecto.
Autoestima: conocerse a sí mismo y sentirse a gusto con la persona que somos es el ítem más importante antes de la autorrealización. Al ganar las batallas que libramos con la autoimagen, disfrutamos de nuestro ser y nos sentimos cómodos en nuestra propia piel.
Autorrealización: llegar a este lugar es haber encontrado nuestro propósito en la vida y llevarlo a cabo, la falta de sentido puede atormentarnos, pero la autorrealización trae calma y propósito permanente.
Lograr la satisfacción de estas necesidades no es fácil, muchas veces no depende de nosotros, pero si ponemos empeño en ello, podemos vencer las carencias. A menudo creemos que nos falta más de lo que tenemos para solucionarlas y resulta que no es así, la perspectiva desde donde miremos la vida puede brindarnos resolución y esta se puede cambiar con la orientación adecuada.
¿Cuáles son las técnicas empleadas en la orientación y el crecimiento personal?
Encontrar nuestro propósito es una tarea exigente, pero alcanzarlo puede ser aún más retador. Para lograrlo es necesario tener las herramientas y la energía adecuadas.
Aquí algunas claves:
Autoexploración: para definir lo que queremos llegar a ser y a tener, es importante conocer lo que nos llena. Meditar sobre nosotros mismos y luego visualizar concretamente esas ideas, nos da los objetivos finales.
Pensamiento positivo: si llegamos a hacer el ejercicio de cuántas ideas negativas tenemos durante el día nos sorprendería, frases como "no puedo", "no soy capaz", "eso no va a pasar" y "nunca lo voy a lograr", aparecen de vez en cuando y debemos tener la fuerza para hacerlas desaparecer porque terminan por nublar nuestras ideas. Invertir esos pensamientos de negativo a positivo puede funcionar.
Gratitud: otro ejercicio que podemos hacer a diario es pensar en cinco cosas por las que estamos agradecidos antes de dormir. Generalmente no valoramos mucho de lo que tenemos y ahí está en gran parte la respuesta para el cambio de perspectiva que podríamos asumir para crecer.
Empoderamiento: es muy fácil pensar que el azar o el destino rigen nuestra vida, así las cosas que nos suceden no son nuestra responsabilidad, pero al entender que somos parte activa de todo lo que nos pasa, adquirimos un nuevo poder para hacer que suceda lo que realmente precisamos.
Planificación: llegar a una meta requiere de un camino, puede ser largo y debemos tener la fuerza y la energía para emprenderlo, ir encontrando motivaciones poco a poco y no rendirnos con los posibles reveses, sino estar dispuestos a trazar una nueva ruta antes de retroceder.
Pedir ayuda no es sinónimo de fracasar sino parte de las herramientas que podemos usar para lograr nuestros propósitos, la orientación profesional puede ser fundamental en los planes que hemos dispuesto.
¿Cómo te pueden ayudar la orientación y el crecimiento personal en tu vida profesional?
La vida laboral es una pieza de nuestro recorrido vital, por eso debe aportarnos para lograr la autorrealización. Desde la solución de las necesidades más básicas, hasta los elementos que nos nutren personalmente. La vida profesional y el crecimiento personal son complementarios.
En la infancia empezamos a descubrir las actividades que más llaman nuestra atención o lo que más se nos facilitan. Por ejemplo, algunos disfrutarán más de las artes, otros tendrán más facilidad para los números. Esos son los primeros pasos de nuestra orientación profesional, pero no los únicos. Más allá de los gustos o habilidades, también se debe tener en cuenta que la orientación profesional nos lleva a una decisión de vida con amplias implicaciones, tanto temporales como económicas. Lo que decidamos hacer en el futuro debe aportarnos económica y personalmente, los gustos y habilidades pueden cambiar o mejorarse, así que la orientación nos puede ayudar a ver más allá de ellos y tomar las decisiones adecuadas.
La orientación puede ser necesaria en diferentes momentos de la vida profesional, por ejemplo, para emprender nuevos estudios o buscar otro enfoque laboral. Aunque podemos cometer errores es más sencillo si contamos con la ayuda que nos acerque las respuestas correctas.
¿Cómo luchar contra los pensamientos parásitos u obsesivos?
Los pensamientos obsesivos pueden ser dañinos aún si son buenos, ahora si son negativos se convierten en pensamientos parásitos que pueden socavar la seguridad y el optimismo que tenemos. Evitarlos nos da fortaleza y despeja nuestra mente para otras ideas.
Los pensamientos parásito tienen diferentes niveles, por momentos pueden parecer inofensivos, se asoman de vez en cuando, pero si toman fuerza se vuelven hirientes y hasta parece que se disfrutara de ese dolor. Si permitimos que el pensamiento se instale será difícil eliminarlo y se convertirá en una verdad que nos limita. Aquí algunas claves para evitar que eso no suceda.
Dimensión: es importante ser conscientes de que un pensamiento es solo eso, no nos determina y tampoco controla nuestro actuar.
Sin invitación: una vez dejamos que estos pensamientos se instalen ya no los podremos sacar, así que cada vez que los veamos aparecer, debemos dejarles claro que no están invitados.
No interacción: tratar de identificarlos, controlarlos o razonar con ellos es perder el tiempo, son ideas nocivas que nos quitan energía y tienen la importancia que les damos, así que debe ser poca.
Tranquilidad: no podemos perder la paciencia frente a estos pensamientos, es mejor meditar un momento, concentrándonos en la respiración para despejarnos.
¿Quién te puede ayudar?
Hay diferentes tipos de orientación según el momento vital en el que nos encontramos, por ejemplo, en la edad escolar tenemos la orientación profesional, pero más adelante podemos necesitar un coach de vida que nos ayude en la toma de decisiones.
Otra ayuda constante puede ser la de un terapeuta con el que trabajemos para encontrar estrategias y respuestas alrededor de la autorrealización. Consulta nuestra página para los diferentes profesionales que puedas necesitar.
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