¿Debemos ser políticamente correctos?

¿Es bueno ser políticamente correctos? La respuesta debería ser "sí", porque vivimos en un mundo globalizado donde la discriminación no tendría por qué tener cabida y porque estamos de acuerdo en que la exclusión es un crimen igual de condenable que las guerras, la violencia, la corrupción y el asesinato, que nos perjudica a todos, pero muy especialmente a quienes son diferentes por su grupo étnico, religión o condición social.

Aún así, ser demasiado correctos puede conllevar a políticas que acorten nuestra libertad individual de acuerdo a nuestros propios sentimientos, y nos puede impedir tomar decisiones sobre lo que es o no 'adecuado' en determinadas situaciones. Este dilema impide tomar elecciones apropiadas a nuestro criterio y no a lo que la sociedad considere que esté bien o mal.

En este artículo lo que llamaremos 'corrección política' se refiere a actuar o a comportarse de una manera adecuada, sea aceptada por todo el mundo y se describe como:

políticas destinadas a no ofender a grupos particulares de nuestra sociedad.

La finalidad de la corrección política es evitar conductas consideradas excluyentes contra grupos desfavorecidos o discriminados en el discurso público o que reciben trato peyorativo en los medios de comunicación.

El término nació a finales del siglo XX como crítica de los conservadores a la nueva izquierda, por considerar sus políticas "demasiado liberales" y se caracterizan por no tener un control definido y sin horizonte o finalidad alguna y que se ha ido popularizando gracias a una serie de tácticas con el propósito de incluir a todos con cortesía y sin ofensas.

Si bien la idea de la corrección política es noble, y es un gran paso para alcanzar lo que sabios como Tomás Moro interpretaba como una "utopía", la corrección política puede interpretarse como una manera cosmética de ocultar otras intenciones que no van de la mano con la inclusión.

No basta con cambiar el lenguaje, también las actitudes encaminadas a fenómenos de cuestión política que realmente incluya a todos. No basta con que un político diga que no es racista si termina usando términos racistas, tampoco es suficiente si una cadena de televisión realice un show que es conducido por un hombre de color, hispano, asiático, vegano, homosexual, si apoya a un conservador con políticas que lleguen a perjudicarlos.

Se entiende que la idea de la corrección política es corregir los errores del pasado, pero al carecer de una naturaleza definida, puede ser usada por aquellos que buscan encubrir algo haciéndolo ver como bueno o dando la sensación de que todo ha cambiado, aunque al final nos damos cuenta de que lo único que ha cambiado es el nombre.

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