¿Cómo supero mi apatía social?
Buenas noches
Pasa que... bueno, no sé por donde empezar... tengo la necesidad de ser activa socialmente por simple conclusión lógica a la situación de estar en el mundo y tener que convivir en el mundo, ademas, porque para realizar algo que quiero hacer necesito de los demás y no porque realmente quiera. Voy a tratar de explicar mi caso.
Toda mi vida me he sentido sola, pero, digamos que más o menos hace 5 años que lo estoy de manera casi completa, digo casi, porque sigo en contacto con mi familia, algo que le agradezco mucho a la vida.
Hace 5 años estoy viviendo sola, hace 3 más o menos dejé de tener, o mas bien, de buscar relaciones trascendentes. Voy a mi trabajo, saludo y hablo lo que tengo que hablar, no me interesa entrar a intimar con nadie. Las únicas relaciones trascendentes que mantengo es con mi familia, a la cual veo más o menos una vez a la semana, a veces cada 15 días. Lo cierto es que este tiempo sola ha sido para mí espectacular. Me he podido encontrar, he podido quererme, he podido hacer mis cosas de manera libre, me he podido escuchar y me he podido valorar. Pero he llegado al punto en que realmente no quisiera salir de mi casa. El mundo me fastidia. La gente me fastidia fácilmente. No encuentro personas que pueda considerar valiosas. Creo que he subido demasiado mi umbral de intolerancia y no tolero muchas cosas de la gente que están en un rango normal de humanidad. Sé que al igual que ellos soy imperfecta, pero realmente no tengo ganas de aguantar sus imperfecciones.
Hace poco, por cosas de la vida, pude recordar un detalle de mi infancia que tal vez por lo mismo doloroso, no lo había querido recordar en su dimensión. Me vi a mi encerrada en un baño, llorando a lagrima viva pero ahogando mis sollozos para que nadie me escuchara y sentí lo que sentí en ese momento: un dolor profundo en mi corazón, un hueco enorme, un vacío insondable, mi corazón me dolía sin saber que hacer, me dolía el pecho. Me retorcía las manos y me jalaba el cabello. Duré mas o menos como media hora allí y luego me obligué a calmarme, a lavarme la cara con agua y esperar a que se me pasara un poco el enrojecimiento de la cara para salir y seguir haciendo como si no pasara nada. Ese ataque lo tuve varias veces en diferentes lados. En uno de ellos tenía un baygon a mi lado y lo miraba con mucho deseo, como si esa fuera la solución a mis problemas. No sabía que era más grande si mi miedo a tomármelo o a seguir adelante de la misma forma. Ganó el miedo a tomármelo por lo visto.
Como dije antes, toda mi vida me he sentido sola. Tengo una familia, y no digo que sea una mala familia, pero es una familia que no supo acompañarme. No los juzgo. Cada quien desarrolla diferentes capacidades, tal vez ellos nunca pudieron desarrollar esa capacidad o tal vez, yo siempre estuve inclinada a sentirme sola. Eso todavía no lo he podido esclarecer. Lo cierto es que esos ataques eran por la inmensa soledad que sentía en mi corazón acentuada por el hecho de estar acompañada físicamente pero emocionalmente a la deriva. De todo eso creo que en mi corazón adopté como verdad que no hay nada peor que estar rodeada de gente pero sentirse sola (por ahí hay un lema que dice eso y estoy completamente de acuerdo). No puedo decir que fue malo porque tal vez el que mi familia hubiera estado de cuerpo presente pudo evitar que me suicidara, como digo no es una mala familia, de alguna forma la valoraba aunque en otro camino me estuviera muriendo lentamente. Estando sola totalmente nada me lo hubiera impedido.
Este "recuerdo" me deja ver que tengo un inmenso miedo a traer de vuelta ese inmenso vacío. Y cada vez que veo o escucho a la gente me encuentro con cosas que fácilmente podrían estarme llevando a eso. Por eso no confío en la gente. Sé que es normal en las personas ser falibles, pero no estoy dispuesta a aguantar eso de nuevo. Estando sola sé que cuento conmigo y sé que esperar de mí, pero no puedo decir lo mismo de las otras personas que ya varias veces me han demostrado esa falibilidad que no estoy dispuesta a aguantar. Todo esto me lleva a la desidia, y al fastidio por la gente. No me siento con ganas de hacer esos protocolos para socializar. Me da mamera que digan chistes tontos, me dan ganas de discutirles de manera grosera cuando dicen cosas insensatas, aquello de "vamos a donde van todos" me exaspera, me parece un corrillo de pendejos. Me desespera todo ese conglomerado de conductas sociales que van dirigidas, valga la redundancia, a socializar.
No sabiendo si esto realmente sea un problema en si, vengo a ver que si es un problema para el tema de mi proyección en la vida, pues tengo planes en donde, sí o sí, tengo que socializar porque necesitaré de la ayuda de varias personas. Mi problema no es saber como socializar, eso lo se hacer, pero no quiero hacerlo porque lo haría como lo había hecho antes de vivir sola, como un conjunto de normas a seguir que lo único que me deja es un cansancio profundo. Necesito que realmente me nazca de corazón. Pero eso es lo que no se hacer. ¿Alguna ayuda?
PD: El tema del perdón ya está. Ya perdoné, me perdoné. Pero queda el miedo a revivir el dolor que no fue pequeño. Y queda lo que ese dolor fue desarrollando: una completa intolerancia social.