​¿Qué es y qué no es la sexología?

A pesar de que en la actualidad se habla más abiertamente de la sexualidad, la definición de asuntos como la sexología siguen siendo un misterio o un campo que sonroja a más de uno que se imagina mil cosas distintas y equivocadas cuando escucha el término.

La sexología es reconocida y respetada como una ciencia. La ciencia que estudia la sexualidad humana y lo que se le relaciona a su dinámica, abarcando aspectos que se relacionan con los social, los fisiológico y lo psicológico; con componentes de diversas especialidades humanísticas y médicas. El sexólogo es un profesional formado generalmente en la medicina o la psicología, que aborda la problemática de su paciente de forma integral. 

Aunque en algunos casos para resolver problemas específicos de sus pacientes los sexólogos trabajan en equipo con especialistas, como por ejemplo con los urólogos, la verdad es que no se ocupan de los mismos asuntos.

Sexólogos

Para despejar algunas dudas es importante decir que el sexólogo:

• No es un urólogo, ginecólogo o endocrinólogo.
• Puede tener conocimiento en dichas áreas pero ellas no son su especialidad.

Es común encontrar confusión entre los pacientes que no saben cómo definir lo que les sucede en términos sexuales, muchas veces no es claro si el tema es físico, fisiológico o psicológico, pero para esto la asesoría especializada es la mejor alternativa.

Un sexólogo es un experto que le ayudará a enfrentar de manera abierta y profesional: Dinámicas de la sexualidad, conflictos, manifestaciones normales o 'anormales', disfunciones y otros asuntos derivados de la sexualidad que traen complicaciones múltiples.

La orientación de estos profesionales suele ser más general y preventiva, pero también puede ser terapéutica o clínica desde la especialidad de los sexoterapeutas.

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También problemas de la vida diaria

Como seres sexuales es natural que algunas veces se nos presenten problemas en esta área, lo complicado es no atenderlo o dejar de acudir a consulta por la vergüenza que nos produce hablar de ese asunto. La sexualidad aún es vista desde un ángulo morboso y patológico, pero lo más sano es aceptarla como una parte de nuestra vida y de quienes somos.

"El instinto erótico pertenece a la naturaleza original del hombre. Está relacionado con la más alta forma de espíritu". Carl G. Jung, psicoanalista suizo.

Además, los problemas sexuales no son solo aquellos que afectan nuestra intimidad, pues algunos síntomas pueden no ser tan evidentes como para asociarse a su verdadera fuente. En muchos casos los problemas sexológicos traen consecuencias de la vida diaria, por eso la consulta es importante: Una mirada experta capta mucho más allá y nos ayuda a salir del 'despiste'.

Si tiene algún problema o sospecha que puede tenerlo, busque a un sexólogo pues por supuesto que tendrá terapias y alternativas para ayudarle a mejorar su vida sexual.

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