​¿Puede existir la amistad después del amor?

¿Ser o no ser amigos de los ex? esa es la cuestión en la que nos debatimos muchas veces cuando el amor pasó a ser algo diferente. Si es tu caso esto es lo que te aconsejamos.

20 MAR 2018 · Lectura: min.
​¿Puede existir la amistad después del amor?

¿Eres amigo de tus ex parejas? ¿Crees que es 'peligroso' mantener contacto con tus ex? ¿tu pareja tiene problemas con el tema?

El asunto de mantener una amistad con quienes fueron nuestras parejas siempre da lugar a diferentes opiniones, pero si existió una hermosa relación sería lógico creer en la idea de transformar lo que hubo en una bonita amistad, ¿o no?

No hay una regla universal

La confianza, el respeto y sobre todo el amor, son elementos presentes tanto en una relación de pareja como en una amistad, pero esto no implica que sea automático terminar y ver a esa persona como alguien en quien podemos confiar.

Todo depende del caso y de cómo terminó la relación. Hay quienes opinan que la clave de que sea viable convertirnos en amigos de nuestras exparejas está en no permitir que la relación se desgaste mucho y las heridas creadas se profundicen: es decir, terminar cuando es sano y no esperar que el amor esté sumergido en el odio.

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Quien aspire a conservar una relación de amistad con la que fue su pareja debe saber decir adiós a tiempo y tomar la distancia que se requiera para que ambos cambien la perspectiva.

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Cenizas después del amor

Caer en el círculo vicioso de volver y terminar, una y otra vez con la misma persona, es uno de los riesgos cuando nos aceleramos en considerar a un ex como nuestro amigo. Por eso, ser amigos toma tiempo: porque solo él nos ayuda a recuperar la visión objetiva de las cosas y desistir en venganzas, en demostraciones de 'quién tenía la razón' y otros intereses que no tienen nada que ver con lo que es una amistad.

Si uno de los dos sigue teniendo sentimientos de amor hacia el otro es complicado que lo pueda ver como un amigo, pero es lógico pues el tiempo compartido sigue siendo parte de nuestra historia de vida y hacer un punto y aparte no es tan fácil en todos los casos. Si requieres ayuda para retomar tu camino consulta los especialistas aquí.

Las cenizas que quedan tras una relación de pareja no son necesariamente malas. Si somos claros el uno con el otro y es un propósito real el convertir lo que hubo en una amistad, podemos aprovechar las cenizas y convertir la complicidad construida en un vínculo sano que nos pueda seguir regalando momentos de alegría.

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¿Estoy listo para ser amigo de mi ex?

Es fundamental que si estás en esta situación seas muy honesto con lo que sientes y sepas que ser amigos no implica recuperar la relación anterior sino crear una distinta, es decir, con una nueva orientación.

No te hagas el fuerte: cuídate, aléjate cuando lo creas necesario, date tiempo para sanar las heridas emocionales. Puedes ser amigo de tu ex pero antes debes aprender que esta relación no tiene por qué ser indispensable en tu día a día, debes saber que en definitiva las cosas cambiaron.

Tal vez sea muy difícil, pero te aconsejamos evitar insistir en el amor hasta que duela. Este listado de psicólogos podrán acompañarte en tu crecimiento personal.

¿Qué gano y que pierdo con la amistad de mi ex?

Ya dijimos que no hay reglas universales, por lo tanto, depende de ti identificar si 'ganas' conservando un vínculo con esa persona. Lo que podemos decir es que, si fue especial e importante, existe la oportunidad de que lo siga siendo.

Afanarnos es lo que en definitiva puede causarnos las mayores pérdidas en un proceso de transición de este tipo. Si un día terminas y al otro deseas seguir hablando con esa persona como amigos, es muy probable que te hagas o le hagas daño… Lo más natural es que se necesite un tiempo para reorganizarse y aprender a darnos prioridad como individuos, en vez de darle prioridad a la relación.

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Ganas mucho si aprendes que sin importar si sigues o no en contacto con esa persona, eres alguien valioso y debes cuidar de ti.

Si hubo una conexión que los llevó a tener una relación, puede que surja una amistad pero si lo buscas con desespero algo no está bien y tal vez estás alimentando falsas esperanzas. Si ambos han sanado y sienten equilibrio con su nueva realidad pueden convertirse en grandes amigos que se apoyen entre sí.

Cuando las relaciones terminan en malos términos o ya hay terceras personas involucradas es frecuente que haya rencor, deseos de venganza y otros asuntos pendientes que requieran acompañamiento terapéutico antes de avanzar en cualquier dirección. Todas estas emociones y sentimientos negativos son barreras para que una amistad o cualquier vínculo surja después del amor.

¿Quieres ser su amigo, pero tu expareja no? No busques imponerte. La amistad después del amor es posible si ambos lo desean y son lo suficientemente honestos para esperar que las heridas estén cerradas.

No todos quieren aceptar esta una nueva etapa. No todos desean que su ex siga en sus vidas, y eso además de ser válido, también merece respeto.

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Revisado: Manuel Minorta

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