La ansiedad, un trastorno más común de lo que imaginas

En términos generales, la ansiedad es una respuesta emocional ante el ambiente que se ve como amenaza y, en muchos casos, actúa como un mecanismo de defensa para prevenirnos frente a un potencial peligro. Si se presenta de forma leve, la ansiedad es una respuesta común ante momentos estresantes; pero si la reacción es demasiado intensa, muy frecuente o se presenta sin motivo aparente (la persona se preocupa antes de que los problemas lleguen o se anticipa demasiado a una situación imprevisible) estamos hablando de un trastorno que afecta a un 19% de la población. 

La ansiedad afecta más a las mujeres

La investigadora Olivia Remes, de la Universidad de Cambridge ha analizado 48 estudios sobre la ansiedad y ha llegado a la conclusión de que es un problema más común de lo que mucha gente imagina y que afecta, sobre todo a las mujeres. 

Los trastornos de ansiedad pueden aumentar el riesgo de suicidio, de incapacidad y de precariedad de la calidad de vida. La salud mental es importante para todos y es un derecho humano básico.

• Las mujeres, las más propensas: según las conclusiones de la doctora Remes, las mujeres tienen el doble de probabilidades de sufrir algún trastorno mental relacionado con la ansiedad, sin importar si son de países en vías de desarrollo o países desarrollados.
• Las personas menores de 35 años sufren más cuadros de ansiedad que las de mediana edad o los ancianos. Sin embargo, la excepción está en Paquistán: los mayores de 35 años sufren más ansiedad que los jóvenes.
• Las adicciones al juego o la conexión permanente a Internet y aplicaciones móviles son conductas asociadas a la ansiedad. Según estudios realizados en Asia, las personas más propensas a sufrir ansiedad son las que están conectadas "todo el tiempo" a Internet.
• La ansiedad está asociada a enfermedades mentales como la esquizofrenia y el trastorno bipolar, así como a la esclerosis múltiple.
• También hay enfermedades altamente relacionadas con la ansiedad como los problemas cardiovasculares, las dificultades respiratorias, la diabetes y casi todas las enfermedades crónicas. Los enfermos de cáncer, quienes padecen cardiopatía isquémica o insuficiencia cardíaca, presentan altos niveles de ansiedad.
• Un episodio traumático en cualquier momento de la vida, desata el trastorno de ansiedad. Según la investigación, los índices de ansiedad de personas que sufrieron alguna amputación o fueron víctimas de abuso sexual son extremadamente altos.

• Las embarazadas y las que acaban de dar a luz tienen índices de ansiedad relacionados con trastorno obsesivo compulsivo mucho más altos que el resto de las mujeres.
• Las personas homosexuales o bisexuales presentan índices de ansiedad superiores a la media, y este porcentaje aumenta en las mujeres que se identifican como lesbianas.
• Las personas con deterioro cognitivo (como problemas de memoria) tienen altos índices de ansiedad, así como sus cuidadores; una población a la que debería dedicarse mayor atención y atención psicológica.

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